Boca Juniors comunicó, a través de un comunicado, que Sebastián Villa no jugará en el club después de la condena por violencia de género contra su expareja, que fue dada a conocer el viernes 2 de mayo.
“No participará de las convocatorias de las competencias que deba afrontar el primer equipo profesional de fútbol masculino del Club hasta tanto recaiga pronunciamiento judicial definitivo y sin perjuicio de las medidas que en consecuencia se adopten, las que serán comunicadas oportunamente de así ser necesario”, indicó.
“Oportunamente, el club hizo pública su postura de someter la cuestión a la Justicia en resguardo a las garantías constitucionales correspondientes y en espera al dictado de los pronunciamientos respectivos”, agregó la institución.
En el plano estrictamente profesional, el fallo ponía a Boca ante la obligación de tomar una determinación del delantero de 27 años, que llegó al club a mediados de 2018. Hasta ahora, y a lo largo de todo el proceso (esta es la primera de las dos causas judiciales que afronta Villa que recibe sentencia), el club había elegido un camino intermedio: permitió que Villa siguiera formando parte de su plantel porque la justicia no había fallado.
La condena
El jugador de Boca Sebastián Villa fue encontrado culpable de violencia de género y condenado a dos años y un mes de prisión, en el marco de una denuncia realizada por su expareja por hechos ocurridos en 2020. Con lágrimas en los ojos, el delantero escuchó la condena en su contra.
Junto a su abogado, Martín Apolo, y acompañado por tres amigos y su representante, Rodrigo Riep, Villa escuchó atento y serio el veredicto, y luego se retiró de la sala de audiencias. Si bien en un momento se lo pudo ver con lágrimas en los ojos, el futbolista se mantuvo inmutable mientras escuchaba la condena en su contra.
Durante la lectura del veredicto no estuvo presente de manera física ni virtual la denunciante Cortés, quien consultada al respecto prefirió no participar de la audiencia, según informaron desde la secretaría del juzgado.
En sus últimas palabras, el delantero “xeneize” aseguró que es “inocente” y que “nunca le haría daño a Daniela”.
“Lo que tengo para decir es que nunca le haría daño a Daniela ni a su familia. Soy inocente. Soy una excelente persona, un buen hijo, un buen hermano. Soy inocente, creo en Dios y creo que todo va a salir bien, de la mejor manera”, sostuvo.
De acuerdo a la lectura del veredicto, Villa fue “condenado a la pena de dos años y un mes de prisión de ejecución condicional con costas, por haber resultado autor penalmente responsable de los delitos de amenazas coactivas en concurso real con lesiones leves calificadas por el vínculo en el contexto de violencia de género”.
Además de la condena, que será de cumplimiento condicional, Villa deberá cumplir durante ese tiempo una serie de requisitos que le impuso a jueza, entre ellos fijar una residencia, someterse bimestralmente al control del Patronato de Liberados, no tener contacto con Cortés ni con su familia, abstenerse de consumir estupefacientes o abusar del consumo de alcohol, y el cumplimiento de un tratamiento psicosocial y participar de talleres sobre violencia de género.